¡A la calle que ya es hora!

En medio de la peor crisis sistémica del capitalismo, que ha puesto negro sobre blanco y que, como vemos, cada día lo hace más, sus insostenibles contradicciones, sus defensores aún pretenden hacernos comulgar con las ruedas de molino de su pensamiento único de que esto se puede reformar y reconducir. Pero, eso siempre, sin castigar jamás a los clarísimos culpables y beneficiarios absolutos que siguen encaramados a sus poltronas de poder malvado. Entregando los recursos del Tesoro Público a las grandes corporaciones y bancos que han evaporado y evaporarán sus beneficios a odiosos paraísos fiscales. Profundizando en la privatización y destrucción de los servicios públicos más básicos, que tan necesarios son para un mínimo equilibrio social, como en la Comunidad de Madrid, para ahondar las diferencias entre ciudadanos y de paso convertirlos en clientes de su patético mercado. Tolerando la corrupción en partidos políticos cuyos principales dirigentes están acusados de los atropellos más clásicos de la picaresca y que minan aún más esta falsa democracia donde sólo se defienden los intereses de los menos y donde hasta la jefatura del estado produce bochorno. Éstos quieren que la crisis la paguen precisamente los que la sufren para que los beneficiados sigan siendo los explotadores y que se perpetúe este sistema de auténtica pesadilla.
Pero ya no resultará tan fácil, señores neoliberales y empresarios sin escrúpulos ni conciencia social. Vuestras mentiras y manejos han quedado al descubierto. Sois reyes desnudos que ni tapar podéis vuestras vergüenzas. De sobra conocemos vuestro pensamiento único y quienes optamos por la justicia social y tomamos partido sin complejos por los más débiles con quienes nos identificamos absolutamente, hemos decidido subvertir desde dentro y sin miedo vuestro caduco sistema, de manera pacífica y democrática. Sois pasado y os ayudaremos a caer de una vez para que no os alcéis más en dominadores. A fuerza de argumentación poderosa y pacífica, como decía el maestro Anguita, vamos a poner bombas mentales en el precario andamiaje de vuestros no-argumentos de forma que la gente deje de estar atontada por vuestro circo-fútbol, vuestras letizias y vuestra tele-basura. Con educación verdadera y con conciencia de humanidad para todos y todas, estáis acabados y lo sabéis. La crisis capitalista es ante todo vuestra crisis porque sois sus causantes pero sobre todo porque con ella desapareceréis en la medida en que la mayoría nos hacemos cada vez más conscientes de nuestra dignidad, del poder que nos corresponde y de vuestra incapacidad e ilegitimidad para mandar. Tenéis todo que perder y nosotros todo que ganar. Seguiréis intentando más todavía dividirnos, enfrentarnos y alienarnos pero tenéis motivos de sobra para preocuparos porque el mundo, bien lo sabéis, está cambiando mal que os pese y su futuro... no os pertenece ya (ni nuestras vidas tampoco).
Etiquetas: capitalismo, corrupción, crisis, explotación, injusticia, pensamiento único, transformación